Los manifestantes se protegen con sus paraguas, objeto que se convirtió en el emblema de las marchas. 

La policía de Hong Kong usa la fuerza de cañones de agua para dividir las multitudes que están usando cocteles Molotov contra los edificios del gobierno chino, en el marco de la conmemoración del quinto año del Movimiento de los Paraguas en favor de la democracia.

Miles de personas en Hong Kong  se  reunieron para conmemorar esa campaña fallida, que sentó las bases para las protestas que actualmente afectan el centro financiero de la excolonia británica. Haciendo vivir desde principios de junio su peor crisis política con protestas y reuniones a diario.

El movimiento nacio el dia en que la policía utilizó gas lacrimógeno contra una pequeña reunión de estudiantes cerca del Consejo Legislativo.

“Creo que la gente está preparada para una lucha a largo plazo, porque no es fácil arrancar la democracia al Partido Comunista Chino”, asegura Yuan, ingeniera de 29 años.

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