Estaba sentada con las manos temblorosas, no sabía si gritar, patear, llorar o salir corriendo, había días que lo había notado muy distante y decidí enfrentar la situación metiéndome a su celular, psicológicamente hablando se que no es correcto eso es invasión a la privacidad, de acuerdo a mi familia norteña eso es agarrar al toro por los cuernos y de acuerdo a los amigos de mi ex eso es ser una mujer tóxica, pero realmente nada de eso importaba, ya lo había hecho, sentía un dolor muy profundo en el pecho como si algo se hubiera roto en pedazos, había tantas preguntas; ¿por qué yo?, ¿No soy suficiente?, ¿No se supone que nos casaríamos?, ¿No le detuvo el hecho de que tuviera un embarazo por confirmar?, ¿Por qué estoy aquí?,  ¿Qué me hace estar aquí? ¿Me habrá pegado algo? Porque no solo fue una sola vez, ¿Esas mujeres me conocían, no les importo que supieran que era la cama donde dormía? Tantas preguntas que lo único que hacían es que la cabeza me quisiera estallar.

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Lo único que pude hacer fue abrazarme a mí misma y así de rota como quedé empecé a hablarme a mí misma; Julieta, has salido de peores, una persona no define lo que eres, el decidió hacerlo por voluntad propia, no debiste haber revisado nada porque el que busca encuentra. Y así empecé a “animarme” aunque en realidad eso fue obsoleto, nada ayudaba, lloraba por todos los lados que andaba. Por supuesto que lo evitaba a toda costa, al contrario, peleaba por todo, porque tenía tanta rabia contenida, que lo único que me provocaba en ese momento era pelear con él.

También evite a mis amigas (os) y a mi familia; si hay alguien que me conoce a la perfección es mi madre, así que a ella es a la única que no le puedo mentir viéndola a los ojos, a mi ex si podía verlo a los ojos y pretender que no pasaba nada, que todo seguía igual. Fue la primera vez en mi vida que yo había sentido esa clase de dolor, mis amigas me habían contado cuando a ellas les habían sido infiel y yo con la mano en la cintura les decía … es un pendejo consíguete a otro, pero ahora que lo estaba viviendo en carne propia, debo decirles que un dolor muy grande, todos los sueños, ilusiones, EXPECTATIVAS.

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¡Claro! Ahí estaba el punto, forme EXPECTATIVAS de una persona, de una relación desfasándome de la realidad. ESO fue lo que me empezó a calmar, darme cuenta que lo que él había hecho, no me lo hizo a mí, se lo hizo a el mismo y a la relación, darme cuenta que lo que ahora sentía SI era mi responsabilidad, y que también era MÍ responsabilidad las acciones que iban a proceder de ahí en adelante.

Así que comencé a buscar una libreta que yo tenía guardada donde escribí todas aquellas cosas que NO QUERÍA de una relación de pareja y todas aquellas cosas que SÍ QUERÍA. Y ahí estaba todo escrito. Cuando leí eso ya sabía lo que tenía que hacer.

No les digo que reaccioné de la mejor manera, que no hubo reclamos y llanto (porque de por si soy mega chillona), pero lo amara lo que lo amara, sabía que la mejor decisión es que cada quien tomara caminos separados, yo siempre he dicho que en el momento en el que una persona voltea a ver a otra persona que no seas tú, es porque realmente no eres lo que esa persona que busca, y AHÍ tienes la clave de todo, ¿para qué quieres estar con una persona que no sabe lo que quiere? Que, aunque está contigo está ausente, que su corazón, su mente y su atención está en otras cosas.

Es mejor que valores tu tiempo y te valores a ti mismo para que en ese momento tú puedas encontrar a una persona que realmente se comprometa contigo, con estar contigo y compartirse contigo.

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Debo decirles que al platicar esto con varios amigos míos llegamos a la conclusión de que cuando alguien te es infiel, es una herida que tarda en sanar, es bueno que vayas a terapia que recibas ayuda, porque te engrandece la huella del abandono y la huella del rechazo, y solamente eso lo puedes trabajar desde los orígenes para que puedas fortalecerte cada vez más, actualmente lo digo de corazón, yo no le guardo rencor, al contrario le agradezco porque fue un gran maestro que me enseñó a amarme por sobre todas las cosas, a decidir por mí en la vida y que las cosas que sucedan por acciones de los demás no dependen de mi sino de ellos mismos, y como se lo dije la última vez que lo vi, es mejor que seas libre de este compromiso que tienes conmigo porque yo no soy la mujer que tú necesitas y definitivamente tu tampoco eres el hombre que yo necesito.

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Cuando tú hablas desde el perdón, solito tu corazón va sanando, pero el perdón no significa que olvides, significa que a pesar de lo que sucedió AGRADECES y AVANZAS.

La lección que les puedo dar de mi experiencia es: No revises su celular, no le prohíbas hablar con alguien, no le bloquees personas, no hagas nada que involucre su privacidad, no tienes que hacerlo, quien te ama de verdad siempre hará lo correcto, quien está hecho para ti simplemente no va a fallarte, en cambio quien no es para ti, no importa cuanto lo cuides, no importa cuánto le prohíbas, no importa nada, porque siempre encontrara una manera de traicionarte.

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